El warning me asaltó a la cabeza de forma inmediata nada más levantarme de la cama: "Hoy cumples 40 tacos campeón". ¡Qué vitalidad, qué energía y ¡¡ Ese optimismo impregnado de ingenuidad duró precisamente lo mismo que tarda uno en ir a miccionar a esas horas de la mañana. Así mientras imitaba al niño Manneken Pis y me divertía haciendo esos patéticos ejercicios prostáticos de control de dirección y de presión de salida del dorado fluído, empezó a decaer aquél falso ánimo. "¡¡Ostras tú¡¡, ¿¿ya te has chupado 40 años?? " Pero cacho carne con ojos, ¿¿¿en qué te los has gastao???
Era lógico, ante la ansiedad y la desazón surgida de improviso fue necesario un chute superior de insulina. Se me había olvidado comentar (la falta de memoria innata a la mierda de edad que acabo de cumplir) que como anticipo y para que me fuera preparando para los cambios inherentes al cuadragésimo aniversario, la vida me regaló una diabetes monísima y resultona. Digo lo segundo porque no hay habitante de Valencia y de la contorná que no lo sepa y es que "que malito estoy y que poco me quejo" ejem ejem
- Mejor Óscar date prisa, sal de una puta vez del baño y acude rápido al trabajo que con el frenesí de llamadas, redacción de escritos, entrevistas y ver el facebook 126 veces a la hora, se te olvidará el dichoso cumpleaños.-
Y fue entonces camino al despacho cuando mi blackberry hacia alarde de todo su potencial y desplegaba sus diversos tonos para indicarme que había 54 mensajes a través del facebook, 32 sms y 14 correos electronicos, y con un común denominador que no era otro que el de DESEARME FELIZ 40 ANIVERSARIOOOOO¡¡¡¡ ¿¿Y cómo saben los jodidos que son exactamente esos los que cumplía??? ¿¿¿cómo puede ser tan jodidamente publicitado un secreto de Estado???
Para ser sincero, en este día luctuoso, al menos se acuerden de uno para desearle lo mejor aún sabiendo que jamás volveré a ser tan joven como antes, que jamás volveré a poder realizar los excesos que tanto me distinguían, en definitiva que ya voy a permanecer durante 10 años seguiditos en la cuarta planta de este hotel. No deja de ser reconfortante ante tanta muestra de amistad llegar a desear con todas las fuerzas proferir el consabido refrán de "arrieros somos y en el camino nos encontraremos".
Lo curioso es que tener noticias de personas de toda condición, de diversos países, conocidas a lo largo de la peregrinación vital, estimula de tal manera que deseas revivir cada uno de aquellos felices momentos que pasaste con ellos en el cole, en el insti (he dicho yo eso???), facultad, etc... Y te das cuenta que aunque no hayas depositado esa clase de semillita en una mujer que ya sabeis todos con lo que se empuja pa dentro, tienes otra clase de familia a lo ancho y largo de este mundo de la que no puedes más que sentirte muy orgulloso.... TO BE CONTINUED
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